
*** Retrasos en audiencias prolongan el dolor de su familia
Por José Juan TOMAS.
ALTAMIRA, TAM.- A punto de cumplirse un año del feminicidio de Karla Roses, presuntamente a manos de su exnovio Xiabani “N”, el caso continúa sin sentencia debido a constantes retrasos en las audiencias de desahogo de pruebas.
El 19 de septiembre de 2024 marcó para siempre la vida de Elizabeth Roses, madre de Karla. Aquella noche, mientras la joven cenaba en su hogar, recibió un mensaje de Xiabani, quien le pedía salir a hablar con él. Pese a que Karla se negó, el sujeto insistió en verla cerca de su domicilio. Finalmente, la menor accedió a salir unos minutos para decirle que no la molestara más; sin embargo, el agresor la convenció de acompañarlo a “dar una vuelta”. Desde ese momento desapareció.
Horas después, al no regresar, su madre y la pareja de ésta comenzaron a buscarla. Una cámara de seguridad captó a Karla caminando hacia una brecha cercana, lugar donde finalmente fue localizada sin vida.
Justicia lenta y revictimización
A casi un año de este hecho aberrante, Xiabani “N” permanece detenido, pero sin que se haya celebrado la audiencia de desahogo de pruebas, pues en repetidas ocasiones ha sido suspendida por la autoridad. La Fiscalía General de Justicia del Estado de Tamaulipas (FGJT) ha quedado a deber avances claros a la familia de la víctima.
Elizabeth Roses ha denunciado sentirse revictimizada por la misma Fiscalía, además de sufrir acoso e insultos por parte de familiares y amistades del presunto feminicida.
“Esa fuerza me la arrebataron la noche del 19 de septiembre. Aquí sigo de pie, enfrentándome a su madre, a cualquiera que lo apoye. Han pagado abogados para hacer lo imposible y que él quede libre. Estamos a un año y no hemos podido llevar a cabo la audiencia de pruebas. En otros casos, los procesos avanzan con rapidez; el de Karla ha sido demasiado lento”, expresó con indignación la madre de la víctima.
Exigen sentencia ejemplar
Por su parte, Martha de la Cruz López, integrante del colectivo feminista Mujer Manglar, exigió a las autoridades acelerar el proceso y dictar una sentencia ejemplar, que en este caso sería la pena máxima.
La activista también lamentó que, antes del feminicidio, Elizabeth Roses acudió a denunciar a Xiabani “N” ante la Fiscalía ubicada en el sector La Pedrera, donde fue ignorada bajo el argumento de que Karla era menor de edad, pese a que el sujeto la acosaba y amenazaba constantemente.
“Cuando la señora Elizabeth intentó denunciar, le dijeron que no procedía porque Karla era menor de edad. Esa negligencia terminó en feminicidio a manos de su agresor”, señaló De la Cruz López.
El colectivo subrayó que la justicia le ha quedado a deber a la familia de Karla y advirtió que el caso no puede quedar impune.
