Este análisis ha sido realizado gracias a una copia facilitada por Brace Yourself Games actualizada a su versión 1.10.0-b21869-5082c5b, ya disponible para Nintendo Switch y PC en Steam (versión analizada).
POR: Ivan Sortino
Uno de mis géneros favoritos de toda la vida siempre fue el de los títulos rítmicos, desafiantes entregas que ponen a prueba el ritmo y habilidad en cada momento. En la última década, otro género que se volvió masivamente popular es el de los roguelike y roguelite, entregas con posibilidades infinitas: si mezclamos ambos géneros, tenemos como resultado Crypt of the NecroDancer, el roguelike rítmico definitivo, y mi roguelike favorito.
Con 10 años (y contando) de apoyo, el estudio desarrollador independiente Brace Yourself Games busca expandir su saga con un título nuevo, pero diferente: la respuesta fue Rift of the NecroDancer, un interesante juego derivado que mantiene el sello rítmico clásico, pero dejando de lado la exploración de mazmorras, y llevándonos a un nuevo desafío al mejor estilo del olvidado Guitar Hero.
Historia
Nos presenta una trama alternativa a Crypf of the NecroDancer: un día mientras Cadence, nuestra querida protagonista, explora la cripta del NecroDancer, una grieta interdimensional la atrapa repentinamente, llevándola a otro mundo desconocido, ambientado en la época moderna.
En este lugar, se da cuenta que no ha sido la única traída a este lugar, y se reencuentra con viejos conocidos, como Dove, Suzu, Nocturna, entre otros. No tarda en darse cuenta de que este lugar también se ve amenazado por monstruos similares a los que ya luchó en la cripta, que vienen a esta dimensión también a través de las mismas extrañas grietas interdimensionales.
Nuestra valiente protagonista no se quedaría de brazos cruzados, por lo que utiliza su nueva y vistosa guitarra eléctrica moderna para enfrentarse a estas oleadas de enemigos, una vez más al ritmo de la música, mientras busca una forma de regresar a su antiguo hogar.
Es una premisa simple, pero que nos vuelve a traer a sus queridos personajes de una manera interesante, llevándolos a un mundo distinto y moderno: es genial ver cómo se relacionan e interaccionan en este mundo, mientras nos presenta una historia con un desarrollo agradable gracias a su buena cantidad de escenas, junto con algunas sorpresas.
Jugabilidad
Rift of the NecroDancer es un juego rítmico que, a diferencia del estilo roguelike de mazmorras de Crypt of the NecroDancer, ahora adopta una jugabilidad al estilo de Guitar Hero, DJmax y osu!mania, en donde tenemos tendremos que notar las notas, o monstruos, a medida que pasan por una línea, y evitar fallar para no perder salud, y perder en la canción.
En cada canción, tenemos 10 puntos de salud, que irán disminuyendo a medida que fallamos golpear a un enemigo. En algunas partes de cada canción, solemos tener elementos curativos de varios tipos, incluso también con su propio patrón, que nos recuperarán parte de la salud perdida. También tenemos enemigos especiales que, si los derrotamos sin fallar, nos cargará una habilidad especial que podemos activar temporalmente para duplicar nuestro puntaje, y evitar perder salud al fallar.
Tiene dos enormes diferencias muy originales en cuanto a cualquier otro título del mismo género: la primera, es que los monstruos vienen al ritmo de la canción, en vez de simular las notas de algún instrumento. Al igual que en Crypt of the NecroDancer, este ritmo viene marcado por el tiempo de la canción, medido en “BPM” (beats per minute, o pulsaciones por minuto), lo que significa que cada canción tendrá una velocidad distinta.
La segunda diferencia, y su mecánica base, es la idea original que cada monstruo tiene su propio patrón de movimiento. Por ejemplo: los limos verdes resisten un golpe, los azules dos, y los amarillos tres, o los murciélagos se van moviendo entre líneas al recibir daño. La cantidad de enemigos es muy grande, y aprender el patrón y movimiento de cada uno a medida que seguimos el ritmo es una hazaña realmente muy complicada.
Esto crea lo que, para mí, es la revolución del género, que siento que estuvo estancado durante muchos años. Es algo totalmente innovador, y que desafía al máximo los reflejos y la capacidad de aprendizaje del jugador. Tenemos modos de dificultad: fácil, normal, difícil, e imposible. Aun considerándome un veterano en el género, el modo difícil me resulta un gran reto, y el modo imposible hace honor a su nombre.
Pero lo que más cuesta, es cuando aparecen enemigos fuera de tiempo: en muchas canciones, hay enemigos que sí siguen las notas de los instrumentos, a una velocidad mayor al ritmo de la música, y esto lo hacen moviéndose más rápido a un ritmo distinto.
Es muy difícil de reconocer y golpearlos correctamente, y hace que tengamos que aprender la canción de una manera más precisa, recordando en que momentos aparecen, y a qué velocidad golpearlos.
Tenemos una buena cantidad de modos de juegos: modo historia, que incluye las grietas, eventos de historia a modo de novela visual, minijuegos, y batallas contra jefe, y por separados los minijuegos, batalla contra jefes, juego libre de cualquier canción y las adicionales, desafíos con propiedades únicas, modificaciones especiales como el imposible modo coda, e incluso música personalizada con soporte al workshop de Steam en PC, en donde los usuarios pueden compartir sus propias canciones: una locura que otorga posibilidades infinitas.
Si creía que no podía haber un título más difícil que Crypt of the NecroDancer, sus desarrolladores redoblan la apuesta, con un título endemoniadamente difícil, que en sus dificultades más altas hará sufrir incluso a los más veteranos del género. Aun así, en sus dificultades más bajas es más accesible, para que todos puedan disfrutar de su increíble música.
Otro punto clave de su popularidad son sus constantes colaboraciones con otros videojuegos y artistas: Hatsune Miku, Celeste, Super Meat Boy, Everhood, Monstercat, Pizza Tower, hololive, y el reciente Shovel Knight, añadiendo en parte contenido gratuito y de pago. Esto le da una variedad enorme a su repertorio de música, añadiendo contenido constantemente para todos los gustos.
Gráficos
Dejando de lado la estética pixelada de Crypt of the NecroDancer, este nuevo juego derivado opta por un estilo de arte más caricaturesco y colorido, con dibujos y nuevos diseños hermosos, que llevan la estética de la saga a un nuevo nivel. Si bien me encanta su estilo pixelado, creo que este lavado de cara le queda más que bien, y siempre es genial poder ver a nuestros personajes favoritos con mayor nivel de calidad.
Destaco mucho los efectos visuales a la hora de tocar las canciones, tanto las animaciones de los monstruos como todos los efectos que ocurren mientras los golpeamos correctamente, aumentamos nuestro nivel de combo, o utilizamos el poder especial. Es un verdadero espectáculo visual, y se sienta genial como todo se sincroniza cuando logramos seguir el ritmo de la música.
Mi procesador es un MD Ryzen 7 5700G 3.8 GHz, con 16 GB de memoria RAM y una tarjeta gráfica Nvidia GeForce RTX 3060 12 GB VRAM, instalado en una unidad de estado sólido SSD M.2 7300 MB/s, por lo que no tuve problema en correrlo a 60 fotogramas por segundo, sin ningún tipo de bug o error en mi experiencia.
No es un título para nada exigente, pidiendo como requisitos mínimos un procesador Intel Core i3-2100 o un AMD FX-4100, 6 GB de RAM y una tarjeta gráfica Nvidia GeForce GTS 250 o una AMD Radeon R7 240 1 GB VRAM.
Banda sonora
Naturalmente, su apartado más importante es el de su música: en mi opinión, Crypt of the NecroDancer tiene la mejor de toda la historia de los videojuegos, y Rift of the NecrodDancer no se queda ni tan solo un paso atrás, con una nueva musicalización renovada, que nos trae reimaginaciones de las melodías más icónicas, con una inmensa cantidad de melodías nuevas.

Es una locura, con una variedad de melodías variadas de todo tipo, y de muchos artistas: vuelve el legendario compositor Danny Baranowsky, compositor de la banda sonora de Cript of the NecroDancer, y las primeras versiones de The Binding of Isaac y Super Meat Boy. También vuelve Jules Conroy (uno de mis favoritos), y colaboran artistas como Alex Moukala, Josie Brechner, Sam Webster y Nick Nausbaum, sin contar los artistas de todas las colaboraciones, y los próximos por venir.
Nos llega traducido al español de Latinoamérica en todos sus textos, y cuenta con voces exclusivamente en inglés. El trabajo de voces es bastante limitado, siendo solo voces y sonidos puntales: tan solo me hubiera gustado un trabajo de voces completo, ya que las escenas de diálogos tampoco son demasiadas.
Tenemos una buena cantidad de opciones para personalizar los controles lo mejor posible: calibración precisa, opciones de accesibilidad para daltonismo y efectos visuales simplificados, y velocidad de textos personalizables. No se puede modificar el tamaño de estos, pero se leen perfectamente bien.
Conclusión
Una de mis mejores experiencias con el mundo de los videojuegos, fue descubrir Cript of the NecroDancer, para luego golpearme de lleno contra un muro de dificultad que parecía insuperable. Hoy en día, sigo disfrutándolo durante decenas de horas, y aprendiendo muy poco a poco a superar cada uno de sus monstruosos desafíos.
Mi emoción se desbordó con Rift of the Necrodancer, un título que para mí agrado cumple de sobra con las expectativas, trayéndonos una propuesta de juego distinta y revolucionaria, que queda de maravilla con el estilo de la saga. Su nuevo estilo de arte también le queda de maravilla, y todo es muy bonito de ver y disfrutar mientras jugamos cada canción.
No exagero al decir que su banda sonora es una completa maravilla, y está a la altura de las expectativas, jugablemente me atrevo a decir que se corona entre los más grandes en cuanto a dificultad extrema.
Aun así, esto no es una razón para evitarlo, ya que sus dificultades fácil y normal son perfectamente jugables para cualquier tipo de jugador, pudiendo disfrutar así de su historia y banda sonora. Por esto, es un título que recomiendo obligatoriamente a cualquier clase de jugador.
CALIFICACIÓN FINAL: 10/10
Dónde comprarlo
Rift of the NecroDancer se encuentra disponible en formato digital en Nintendo Switch a través de la eShop por Mex$ 227.99, mientras que en PC vía Steam por Mex$ 227.99.
