
Este análisis ha sido realizado gracias a una copia versión 1.003 facilitada por PlayStation México, título ya disponible en exclusiva para PlayStation 5 (versión analizada).
POR: HUGH BELMONT (goukiyaga+sintesis@gmail.com)
Team Ninja ha logrado establecerse como uno de los estudios más prolíficos luego de los formidables Nioh y Wo Long Fallen Dynasty, demostrando tener un gran dominio en el género Soulslike con una temática antigua muy bien lograda por lo que queda en demostrar si el mundo abierto es un área dentro de su éxito.
Al día de hoy tenemos tantos juegos Soulslike que con los dedos de las manos podemos nombrar los más destacados y que además han logrado aportar al género una marca que los haga diferenciarse, desde luego que Elden Ring de Bandai Namco es considerado por muchos el pináculo de los Souls en mundo abierto. Así que veamos lo que Team Ninja nos ofrece con Rise of the Ronin (La Ascensión del Ronin).
La historia
La aventura está ambientada en Japón a mediados del siglo XIX en el año 1867, una época en la que el país del Sol Naciente vivía una serie conflictos políticos y sociales, así como el fin del Shogunato de los Tokugawa luego de años de vivir en aislamiento y que se resiste a la influencia del progreso occidental.
El juego nos pone al mando de un samurái que forma parte de los guerreros de elite denominados Filo Velado; estos guerreros son criados en parejas (huérfanos sin relación sanguínea directa) y entrenados en el arte del combate que comparten habilidades y funcionan como una unidad.
Luego de una operación encubierto fallida por culpa de un misterioso hombre con una máscara de demonio azul, nuestro guerrero es separado de su pareja Hoja Gemela, nuestra líder de clan ordena que abandonemos a nuestra compañera, lo cual provoca la inconformidad de nuestro protagonista y en consecuencia nos vemos obligados a desertar para localizar nuestra pareja, lo que causa que nos convirtamos en un Ronin.
Sin entrar en mayores detalles de la narrativa, el juego nos lleva a ser parte de la tensión política en nuestra búsqueda incansable y a conocer figuras reales importantes de la época. Debo decir que la historia es bastante dispersa, ya que constantemente se nos presentan nuevos personajes y villanos que hacen que perdamos interés, pero que en cierta forma recobra impulso con ciertos giros de trama.
Es importante mencionar que tendremos momentos en los que tendremos que decidir nuestro curso de acción, algo que afecta poco y nada en la narrativa, ya que solamente definirá nuestra afiliación a la facción pro o anti-Shogunato, que a su vez hará que las misiones cambien entorno a nuestra preferencia política.
Asimismo, rumbo a la conclusión lamentablemente tendremos una decisión que es la que definirá qué final veremos de los dos disponibles, ambos me han dejado satisfecho, aunque algo que no me ha agradado es que nuestro protagonista la mayor parte de la aventura es mudo, solamente en determinadas cinemáticas suelta algunas frases, haciendo que se pierda inmersión, ya que ni siquiera en la toma de decisiones hay vocalización en el personaje.
Jugabilidad
Rise of the Ronin es un Soulslike con elementos de rol en mundo abierto, desde el comienzo de la aventura el juego nos sumerge en un editor para crear a nuestro personaje al definir su aspecto físico, asimismo, crear el de nuestra Hoja Gemela, me ha gustado la libertad que tenemos para darle ciertas características visuales como tatuajes o marcas, así como el género.
Tendremos tres niveles de dificultad, ya sea que deseemos un reto asequible, uno más balanceado u otro más desafiante, en cualquier momento podemos cambiar el ajuste desde el menú de pausa. Luego de crear nuestro personaje, tendremos que elegir dos estilos de combate iniciales definidos por distintas armas: ya sea una katana, una lanza, espadas dobles, entre otras.
Lo anterior es solamente el punto de partida, ya que con nuestro progreso y al acceder a misiones secundarias, tendremos acceso a otros estilos de combate que aprenderemos de nuestros rivales, sin embargo, todos están definidos por tres grupos: Jin, Chi y Ten, que tendremos que variar de combate en combate para tener mejor efectividad en los golpes.
El juego tiene una mecánica de desvío llamada contra-destello, que al ser ejecutada en el momento justo provocará que el Ki del rival disminuya y al agotarse, quedará expuesto a un ataque letal. Sin embargo, requiere precisión quirúrgica que se vuelve un poco inviable al enfrentar muchos enemigos al mismo tiempo.
De igual modo contamos con un gancho que me hizo recordar a Sekiro: Shadows Die Twice, por la manera tan sencilla e intuitiva de utilización, incluso la podremos utilizar en combate de una manera bastante satisfactoria.
El árbol de habilidades se define por los atributos: fuerza, destreza, carisma e inteligencia, que a su vez nos permitirán realizar mejores ataques ofensivos y defensivos, así como mejorar nuestras capacidades sociales (como mentir, intimidar o convencer) que nos facilitarán ciertas situaciones con mejores beneficios. Dependiendo el origen que elijamos para nuestro personaje, tendremos algunas ya aprendidas. Pudiendo reiniciar el árbol por medio de un ítem consumible que compremos en el mercado negro.
Algo que me ha gustado es la variedad de misiones secundarias que podemos tomar, aunque rápidamente pierde novedad dada la repetitividad con la que se presentan, pero que por desgracia el juego nos obliga a tomar para nivelear a nuestro personaje acorde a las misiones principales. Se salvan aquellas misiones en las que reforzaremos la amistad con nuestros compañeros que ocasionalmente nos ofrecerán apoyo en las misiones.
Sin necesidad de innovar, logra sorprender
Lo mejor de todo es que el juego nos permite jugar en multijugador en línea, en la que dos espontáneos se nos unirán a la partida, y que hace que la misión sea un paseo, ya que rápidamente podemos abrumar al jefe. Aunque es una función opcional y no todas las misiones permiten el apoyo en línea.
Las IAs que nos acompañen en determinadas misiones, nos permiten intercalar de personaje a tal punto que podremos compensar un estilo de combate que no tengamos asignado en nuestro personaje y ampliar el abanico de opciones en la ofensiva.
También contamos con un planeador que nos permite recorrer zonas extensas vía aérea, además de nuestro fiel corcel con el que incluso podremos atacar a los enemigos. Contamos con situaciones en las que podemos optar por el sigilo muy bien conseguido, que nos permite librarnos de enemigos rápidamente sin necesidad de un combate que alerte a todo mundo, reduciendo la cantidad de rivales que resulta muy gratificante.
Los enfrentamientos contra jefes, tienen un elevado nivel de desafío en los que comúnmente tendremos que poner atención al entorno, ya que vendrán acompañados y buscarán la manera de flanquearnos, siendo necesario no perder nuestra posición, ya que nos pueden hacer la vida imposible.
El sistema de progresión está muy bien equilibrado, ya que incluso en la derrota podremos obtener puntos de habilidad que nos permitan mejorar nuestras técnicas de combate. Desde luego, si somos derrotados, perderemos los puntos de karma que vienen siendo una especie de ‘comodín’ a los puntos de habilidad que podemos aplicar. El enemigo que nos derrotó será marcado para una venganza, que si lo derrotamos nos dará de vuelta el karma acumulado, si caemos nuevamente, lo perderemos todo.
Los gráficos
Rise of the Ronin ofrece una buena recreación del Japón feudal, ya sea recorriendo el antiguo Yokohama, entre otros sitios increíblemente bien realizados, sin embargo, a nivel de detalles es donde más se adolece el juego, Team Ninja en sus títulos jamás se ha destacado en ser un portento gráfico y aquí queda demostrado nuevamente.
El juego nos ofrece tres modos gráficos: fidelidad, trazado de rayos y rendimiento. Lamentablemente, no hay una diferenciación destacada, siendo la más recomendada la de rendimiento en la que el juego corre a 60 fotogramas por segundo, durante mi partida no sufrí de fallos, aunque si notorios retardos en la carga de texturas o leves ralentizaciones, esto sin ser algo devastador o algo que arruine la experiencia, ya que en general mantiene bien su tasa de fotogramas estables y fluidos a pesar de la buena cantidad de acción en pantalla.
Asimismo, nos ofrece un modo foto que accederemos desde el menú, pudiendo asignar un atajo para ahorrarnos pasos y entrar rápidamente al modo. Es fascinante la gran libertad que tenemos para la foto con una completa cámara libre y efectos que nos permitirán tener nuestra toma perfecta. Así como marcos y calcomanías, lo mejor de todo es que nos permite cambiar las expresiones de nuestro protagonista y hasta cambiar la posición de la mirada.
Lamentablemente no podemos cambiar la pose de nuestro personaje, pero, el juego nos permite adelantar fotograma por fotograma con triangulo para obtener el mejor momento de la acción, asimismo, tendremos un reloj con el que podremos cambiar la hora del día y obtener ese momento del día idóneo para fotografiar.
Al ser un exclusivo de PlayStation 5, lógicamente tiene una completa inmersión con el DualSense dándonos esa retroalimentación háptica mientras exploramos el mundo o montamos a caballo, sintiendo el choque de las espadas, así como una excelente integración de los gatillos adaptativos al usar armas a distancia.
La banda sonora
En lo musical corre a cargo del compositor Inon Zur (responsable de las BSO de Starfield, Dragon Age y más) que nos ofrece una musicalización con instrumentos de cuerda para esa ambientación japonesa e instrumentos de cuerdas para darle esa influencia occidental, que en conjunto logran crear una excelente inmersión a un nivel cinematográfico.
En cuanto a las actuaciones de voz, nos ofrece en español Latinoamérica, inglés y japonesa, siendo mi predilección las voces niponas dada la ambientación, aunque las actuaciones de voz en español Latinoamérica hacen un excelente trabajo, a pesar de tener un protagonista carente de emoción vocal, toda vez que la mayor parte del tiempo es mudo y hace que se pierda toda la inmersión. Asimismo, el juego sufre de una mala normalización en el audio, oyéndose los efectos a un volumen mucho mayor que al de las voces, lo cual nos obliga a reducir el volumen de los efectos desde el menú de audio.
Es una pena que no nos ofrezca las voces de España, para aquellos curiosos que nos interesa disfrutar de las actuaciones en español de allende los mares. Siendo PlayStation dueña de esta pista vocal, es decepcionante que no venga incluida de serie, pero esto es un gusto personal.
En cuanto a los textos y subtítulos nos ofrece la posibilidad de asignar un tamaño grande, aunque apenas y son pasables para la lectura, realmente le hace falta a PlayStation una homologación en el tamaño de los subtítulos, ya que juegos como The Last of Us nos ofrecen un tamaño óptimo y la posibilidad de cambiar los colores, mientras que títulos recientes de otros de sus estudios propios ofrecen tamaños bastante decepcionantes con pocas opciones de accesibilidad.
Conclusión
Rise of the Ronin es una excelente experiencia Souls de mundo abierto con samuráis, Team Ninja saca a relucir su experiencia en el género al ofrecer un estilo jugable dinámico y variado que se ajusta a nuestro gusto, logrando destacarse sin necesidad de innovar, aunque es muy desaprovechado por la falta de enemigos que nos permitan explotarlo por completo.
La narrativa tiene un inicio espectacular, pero va decayendo por el poco peso de las decisiones y su desarrollo disperso. En lo gráfico luce muy bien creando una buena inmersión en el Japón feudal sin ser puntero. Mientras que en lo musical logra sumergirnos en su mundo con un bien nutrido conjunto de tonos sonoros que equilibran lo clásico oriental con una sutil influencia occidental.
Calificación final: 8.5/10.
Dónde Comprarlo
La Ascensión del Ronin/Rise of the Ronin está disponible en formato digital para PlayStation 5 por US$69.99 dólares en la PSN Store. La edición física al momento de la redacción está disponible en Amazon México para PS5 por $1,304.10: www.amazon.com.mx/Ascensi%C3%B3n-del-Ronin-Standard-PlayStation/dp/B0CQ71K54B