David Ed Castellanos Terán.
@dect1608
El presidente Enrique Peña Nieto, rompió con los protocolos, ni siquiera Egidio Torre Cantú en seis años se desenvolvió como hizo el mexiquense este martes en la ciudad de Altamira para entregar más de 3 mil títulos de propiedad.
Peña se bajó de “la dura”, me refiero a camioneta blindada en la que se trasladó desde el aeropuerto internacional de Tampico, “Francisco Javier Mina”, hasta las instalaciones de la Asociación Ganadera de Cebú en Altamira; cuando de pronto, en lugar de seguir el caminito blindado que le tenían, trotó hasta el final de las miles de sillas donde le esperaban y fue a saludar a los del fondo, les dio la mano y los celulares ya estaban listos para la foto del presidente, los tamaulipecos de allá atrás, nunca se esperaron que Peña Nieto, iba a tomarlos en cuenta, allí poco a poco fueron tomando confianza tanto los invitados como el mismo jefe del ejecutivo federal y de pronto la primer selfie, seguida de un bullicio pues todos podían observar lo que hacía Enrique Peña, gracias a unas enormes pantallas que se instalaron para que todos pudieran ver la ceremonia.
Acompañado del gobernador tamaulipeco, el de Atlacomulco, llegó a las 13 horas con 4 minutos y le invirtió casi media hora para saludar a los beneficiarios del programa “Papelito habla” que los acredita como propietarios de un “pedacito” de México. Miles de fotos le tomaron al presidente, muchas selfies se tomaron con él, también él tomó infinidad de autorretratos, prácticamente todos salieron motivados pues la rigurosa vigilancia y los engorrosos filtros de seguridad para ingresar al evento, fueron tema olvidado por los ciudadanos, como también, Enrique Peña Nieto, dejo para otro día el tema de la inseguridad en Tamaulipas, pese a los constantes enfrentamientos entre sicarios y fuerzas armadas.
El tema central era la tenencia de la tierra y aceptó que existen 153 mil expedientes agrarios con irregularidades para validar la propiedad; sin embargo, Peña Nieto en su discurso, también hablo de lo “bien” que van las reformas estructurales, las inversiones que vienen y aprovechó para destacar el crecimiento económico de 2.5 por ciento pese al entorno internacional adverso que tiene estancada a la mayoría de las naciones e incluso, muchos países no solo no crecen, sino su economía ha decrecido –no lo digo yo, lo dijo el Presidente- y claro al fin priista, en su discurso se preguntó, si esto había sido un logró de anteriores gobiernos, pues a tres años de que regresó el PRI a Los Pinos, el país ha crecido un 6 por ciento, más de lo que habían crecido “esas administraciones” (las del PAN por su puesto) y todo gracias a la estabilidad económica que guarda la nación… confió en que a los mexicanos nos va a ir mejor.
“papelito habla” es una acción nacional poco valorada para quienes no tienen problemas de certidumbre y validez de su propiedad, pero para los 3 mil beneficiarios, no es otra cosa que el patrimonio de sus hijos, por lo que muy acalorado y sudando la gota gorda, Peña Nieto, exigió a la SEDATU, acelerar los procesos de los títulos de propiedad para que en la próxima semana, se entreguen 20 mil escrituras más, de las cuales 18 mil de estas, serán también para familias de Altamira, ciudad ubicada en el sur de Tamaulipas.
Sin más, el titular del ejecutivo federal, exhortó desde Tamaulipas al resto de los mexicanos, seguir adelante, trabajar duro sin esperar que venga otro a hacer lo que le corresponde a cada quien, ir sin cansancio en busca de sus sueños, sus planes y metas personales, que para ello su gabinete trabaja para crear las condiciones óptimas para que usted alcance su propósito.
Que difícil asimilar los números que indicó, Enrique Peña Nieto, cuando no vemos un gobierno tamaulipeco productivo y la inseguridad es tema de todos los días.
