*** Insisten en exigir la renuncia del gerente general Jorge Federico Rivera Schotte
Por: Isaac MOLINA ZAPATA.
TAMPICO, TAM.- Las quejas por el mal servicio y abusos por parte de la COMAPA Zona Conurbada siguen acumulándose, pues el gerente general del organismo Jorge Federico Rivera Schotte se ha negado a atender a los inconformes, quienes están hartos de las anomalías y malos tratos de la dependencia.
Líderes de diferentes asociaciones civiles y activistas sociales, se manifestaron frente a las oficinas del organismo operador del agua, para dar a conocer parte de las irregularidades que aseguran, comete sistemáticamente la COMAPA Zona Conurbada.
Roberto Aguilar Arias, dirigente de la agrupación denominada 17 de Enero, señaló que una de las anomalías es que por detectar una fuga la COMAPA les está cobrando más de tres mil pesos, destacando que el personal de la dependencia realiza dicha labor de una manera rudimentaria, “con un tubo solamente están escuchando por fuera de la tubería, no lo hacen con algún detector electrónico o aparatos especiales para tal fin”.
En el caso específico que expone, dijo que en vez de que le hicieran un ajuste por los exorbitantes costos de los servicios, fueron al domicilio y le retiraron “completamente válvula, macho, medidor y pusieron un tapón, eso es anticonstitucional”.
Resaltó que por esa acción que cometieron los empleados del organismo operador del agua se puede demandar penalmente a la COMAPA, “si no se solucionan los problemas sí lo vamos a hacer”.
Dijo que han intentando dialogar con el gerente general pero Jorge Rivera Schotte no los ha querido recibir, “con la actual administración cero comunicación, no nos recibe; con los anteriores administradores sí se tuvieron mesas de diálogo y pláticas”.
Por último, Roberto Aguilar recordó que el problema del pésimo sigue vigente, pues el agua sale sucia, apesta y está salada.
Por su parte la Lic. Aydeé Contreras Zarazúa, presidenta de la agrupación Mujeres con Acciones Nuevas, A.C., reclamó que el organismo operador haya cortado el servicio al albergue de personas con adicciones “Casa de Rescate Victoria”, porque habían tenido una fuga pero ellos viven de la caridad, y en ese lugar proporcionan alimentos a los enfermos necesitados, llegando a tener en ocasiones hasta 40 personas internadas.
Explicó que les cortaron el servicio por un adeudo de más de tres mil pesos que les están cobrando por un mes de atraso, “no queremos que nos regalen el agua sino que sea un precio justo. Antes de que les cortaran el agua tenían un mes de adeudo”.
Finalmente, la activista social pidió de la manera más atenta el apoyo del gobernador para que le pida la renuncia a Jorge Federico Rivera Schotte y a Gabriel Guerra, pues estas personas en lugar de ayudar a la ciudadanía de Tampico y Madero la están perjudicando.