Greenpeace lo desconoce como partido ambientalista
Aliarse a otros partidos: su objetivo principal
Un partido de exclusividad para unas cuantas familias
Por RAMÓN PADILLA LOO
TAMPICO, TAM.- Desde que fue fundado en 1986, el Partido Verde Ecologista Mexicano (PVEM), por Jorge González Torres, esas siglas partidistas, así como los objetivos y metas de quienes lo conforman han demostrado con hechos y resultados que fue creado para “engordarle el caldo” a otros partidos políticos mexicanos, especialmente al PRI, y en ocasiones al PAN y bueno, hasta al PRD que, gracias a esas alianzas es como ha podido avanzar y permanecer en el sistema de gobierno que dirige los destinos del País.
Por otra parte, la reconocida organización de “Greenpeace”, desde hace ya tiempo ha desconocido al PVEM como partido ambientalista, pues ya ha sido del conocimiento público que el desinterés de esos mal llamados ecologistas mexicanos, que dicen tener y hacer proyectos a favor de la ecología y el medio ambiente, es solo pura estrategia de mercadotecnia y publicidad política, para mantenerse en el ánimo de la ciudadanía que ha caído en ese perverso engaño.
Ya que, al parecer, sus verdaderas intenciones son las de seguir medrando en la política mexicana, para poder tener acceso a los cargos de elección popular y poder posicionarse en la función pública y de esa manera seguir usufructuando de los beneficios políticos y económicos que se dan al adjudicarse en esas posiciones dentro del ambiente político y del gobierno de México.
Otros de los aspectos que han sido observados y que se han mencionado, es la “brillante” e “inteligente” conformación de sus miembros ecológico-políticos, en donde los beneficios que se logren obtener son única y exclusivamente para un reducido grupo de familias, ya que no permiten que ninguno de sus demás militantes, o sea la “tropa”, tengan el derecho a crecer políticamente, mucho menos económicamente.
Lo que ha derivado en que solo unos cuantos de esas exclusivas familias, o sea la jerarquía, tengan acceso a la repartición del “botín” que les significa estar dentro de la “jugada” política en el país, permitiéndoles enriquecerse y llevar una vida cómoda, económicamente hablando.
Mucho se ha dicho que ese partido político solo ve para sus propios intereses y que eso solo lo han logrado a través de las alianzas y “arreglos” que hacen con otros partidos políticos que requieren de sus estrategias y de los simpatizantes que han caído en sus “garras” y que los jerarcas del PVEM los han “robotizado” y son usados mañosamente en sus actividades proselitistas, así como de sus diversas manifestaciones públicas en pro y defensa del medio ambiente.